

Destruyendo mitos: los paneles japoneses son para ventanas grandes
¿Quién dijo que los paneles japoneses solo son para espacios grandes ? Vamos a romper ese mito desde la raíz. Porque si tu espacio es pequeño, estrecho o con muebles pegados a la ventana… los paneles japoneses de screen pueden ser tu gran descubrimiento.
¿Te agobia el salón con cortinas tradicionales? ¿Has probado estores que acaban quedando raros por la forma de la ventana? ¡Lo entendemos! A veces, lo que parece más sencillo, es justo lo que menos encaja. Ahí es donde entran los paneles japoneses: líneas limpias, cero bulto, movimiento suave y orden visual instantáneo.
Si tienes poco espacio y una ventana corredera, estás más cerca de una solución ideal de lo que crees.
Los paneles japoneses son como el comodín silencioso de la decoración funcional: se deslizan lateralmente, sin ocupar espacio extra, y se adaptan genial a ventanas correderas, que —por suerte— son muy habituales en pisos pequeños. ¿Por qué encajan tan bien? Porque imitan el mismo tipo de movimiento: una hoja se mueve sobre otra, y siempre queda una parte cubierta, igual que pasa con los paneles. Ni estorban, ni chocan, ni hacen falta huecos extra para recogerlos.
Y además, se ven limpios, ordenados y modernos. ¿Te molesta la luz directa? ¿Quieres más intimidad sin cerrar del todo? El tejido screen es tu aliado: filtra la luz sin oscurecer, y lo puedes personalizar en color, apertura, incluso motorización si quieres un extra de confort. Todo, a medida. Todo, con cabeza.
¿Tienes una ventana corredera? Ya tienes medio trabajo hecho.
Mientras otras cortinas piden espacio que no tienes, los paneles japoneses resuelven con estilo, sin comprometer diseño ni funcionalidad.
Así que no, no necesitas una casa con espacio de revista. Solo necesitas elegir bien.
Ya lo sabes si tienes una estancia pequeña y ya te han dicho que los paneles japoneses no son para ti.
¡Pues que no te líen!
Es uno de esos mitos decorativos que nos encanta desmontar, porque sí que son compatibles con espacios pequeños… y pueden quedar de escándalo.